La vista desde el Cerro Campanario, un punto panorámico de ensueño en Bariloche (Río Negro, Argentina)

​Una vez leí en una nota de un turista extranjero que el mejor view point de Argentina era la vista panorámica desde el cerro Campanario; todos los días - desde ese día - quise estar ahí.

​La nota no estaba errada, y aunque me parece parcial elegir sólo un punto panorámico en un país que tiene todos los paisajes posibles, ​el mirador del cerro Campanario​ bien se ganó su fama...

​Yo lo visité - después de leer la nota del extranjero - en noviembre de 2019, el día estaba medianamente nublado pero los rayos del sol alcanzaron a pintar el paisaje.
​Accedí a la base del cerro desde la famosa Avenida Ezequiel Bustillo después de hacer el famoso recorrido turístico por Circuito Chico, y para llegar a la cima ​del cerro tomé ​la aerosilla. El precio de ingreso es de $450 pesos argentinos (unos ​u$s 8 dólares con el cambio actual) ​e incluye la subida y bajada en las sillas voladoras; pero también se puede subir y bajar caminando por un sendero que asciende en paralelo al recorrido de las aerosillas.

Si subís en la aerosilla, no te olvides de sonreír antes de bajar porque va a haber un fotógrafo esperando capturar el momento de tu llegada. Antes del descenso te muestran la foto y si la querés comprar (tiene un precio de $300 pesos argentinos, u$s 5 dólares, en noviembre 2019) te la envía impresa ​a la puerta de tu hospedaje.

Desde arriba (a 1.049 m.s.n.m.) las vistas son increíbles​. Hay por lo menos 6 balcones que recorren la panorámica en 360 grados, siendo el más impactante el que balconea al cerro Capilla (2.167 m.s.n.m.) y al Brazo Blest. Mirando al frente se ve el cerro Llao Llao (1.001 m.s.n.m.), el famoso hotel que lleva el mismo nombre, la laguna Trébol, Puerto Pañuelo, el cerro Capilla, y el cerro Los Fundadores (1.816 m.s.n.m.). Desde este mismo balcón, viendo desde el cerro Millaqueo (1.712 m.s.n.m.) hacia el Norte, se ve el recorrido del lago Nahuel Huapi hasta Villa La Angostura y el Parque Nacional Los Arrayanes, en Neuquén.

​La misma vista espectacular - pero sin viento y con la posibilidad de tomar y comer algo - se tiene desde la confitería que está arriba del cerro Campanario. En el interior también hay un puesto para comprar recuerdos, abrigo y libros​; y vale la pena sentarse en la confitería a disfrutar un rato más de la panorámica ¿Lo mejor? El chocolate en rama que tienen es riquísimo.

E​sta vez lo visité con mi tía, que voló hasta Bariloche, en Río Negro, para visitarme y conocer la ciudad; y digo esta vez, porque estando arriba del cerro ​Campanario, después de haber admirado la panorámica, cuando el fotógrafo me mostró la foto, recordé que mi mamá tiene una idéntica conmigo pero del año 1998, en su habitación. Y yo la había olvidado hasta ese momento. 

​Mi tía tomó ​café, yo compré un libro de Manuel Montes sobre Leyendas Patagónicas, y las dos comimos chocolate en rama con una vista espectacular. Me quedó como reflexión - ​ó duda - cómo una vista que tanto me impactó ​pudo pasar desapercibida por los mismos ojos que hoy tanto la añoran​...

​Información útil ​antes de ​llegar al Cerro Campanario:

- ELEGÍ UN DÍA DE SOL: si tenés la posibilidad de elegir qué día ir no elijas uno con nubes grises, los paisajes naturales realzan sus colores con los rayos del sol y ésta es una panorámica que vas a querer guardarte en la memoria.
- LLEVÁ ABRIGO: arriba, hay viento. Depende de la época del año en que lo visites va a estar más o menos fresco, pero arriba de los 1.000 m.s.n.m. se levanta bastante más viento que en la ciudad y la vista desde el mirador es muy abierta. Si vas en verano, sólo con una campera rompevientos está genial.
​- SUBÍ EL MATE: si sos de l@s que disfruta de tomarse un mate en esos lugares especiales, éste es uno de esos. En el mirador más grande (el que da al cerro Capilla) no hay mesas ni sillas, pero en otros dos balcones que dan hacia el lago Moreno sí; ahí te podés sentar el tiempo que quieras (o que el clima permita) a disfrutar de la panorámica tomándote unos buenos mates.
- NO VAYAS CON PERROS: en la mayoría de las excursiones con aerosillas los perros no están permitidos; es cierto que hay excepciones como sucede en el cerro Bayo de Villa La Angostura por ejemplo, pero las aerosillas del cerro Campanario siguen la regla. Yo consulté si podía subir con Eureka - mi perrita de 5 kilos - y me dijeron que no. Te recomiendo que si, como yo, viajás con tu perro ​lo dejes en donde te estés alojando.

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